4 de Octubre
Miércoles, en el año 2023. Es el 277º día del año (no bisiesto).
Faltan 88 para finalizar el año.
1878. Comienza la Conquista del Desierto – ¿ Hazaña civilizadora o genocidio?
El Congreso Nacional aprueba la ley que asigna partidas para financiar la Conquista del Desierto, la guerra de exterminio que el general Julio Argentino Roca desata contra los pueblos originarios en la Patagonia.
La conquista de tierras asegura el dominio del territorio al sur del río Colorado, y genera latifundios en manos de un reducido grupo de estancieros.
Cuando asistía a la escuela primaria, en 1979, se celebró el centenario de la ‘conquista del desierto’ (término que pusimos entre comillas por razones que la lectura de lo que sigue dejará en claro). Fue ocasión para que orquestas militares recorrieran los colegios, se construyeran mangrullos en las plazas representando a los fortines del desierto, diarios nacionales y regionales y revistas infantiles publicaran suplementos especiales e, incluso, para que el canal 9 de Buenos Aires emitiera Fortín Quieto, la primera miniserie televisiva en color en el país. En General Roca, en el valle del río Negro, tuvo lugar un congreso de historia sobre las campañas militares, y en Choele Choel se inauguró un imponente monumento y se realizó una cabalgata conmemorativa.
A mis once años, me enseñaron que la ‘conquista del desierto’ puso fin a los malones de los indios bárbaros, los cuales robaban ganado, mujeres y niños, y asesinaban a los varones. Me dijeron que los indios no eran nativos sino que venían de Chile, adonde llevaban las riquezas robadas en las estancias y los pueblos de nuestra pampa. Por fin, me aseguraron que las campañas militares de 1878-1885 habían sido necesarias para no perder la Patagonia a manos de los chilenos. Ese era el relato legado por varias generaciones…
Historia:
Los primitivos dueños de la tierra venían resistiendo la conquista del hombre blanco desde la llegada de Solís, en 1516. Don Pedro de Mendoza debió abandonar Buenos Aires en 1536 por la hostilidad de los pampas. Sólo a partir de la creación del virreinato y la consecuente presencia de un poder político y militar fuerte, fue posible establecer una línea de fronteras con el “indio” medianamente alejada de los centros urbanos.
Rosas, haciéndose eco de las demandas de sus colegas estancieros sobre los constantes robos de ganado por parte de los indios, encabezó la primera “conquista al desierto”.
La expedición contó con el apoyo de las provincias de Córdoba, San Luis, San Juan y Mendoza. Rosas combinó la conciliación con la represión.
Pactó con los pampas y se enfrentó con los ranqueles y la Confederación liderada por Juan Manuel Calfucurá.
Calfucurá (significa piedra azul) era el jefe indígena más importante.
Según un informe que Rosas presentó al gobierno de Buenos Aires a poco de comenzar la conquista, el saldo fue de 3.200 indios muertos, 1.200 prisioneros y se rescataron 1.000 cautivos blancos.
El gobierno de Avellaneda, a través del ministro de Guerra, Adolfo Alsina impulsó una campaña para extender la línea de frontera hacia el Sur de la Provincia de Buenos Aires.
El plan de Alsina era levantar poblados y fortines, tender líneas telegráficas y cavar un gran foso, conocido como la «zanja de Alsina», con el fin de evitar que los indios se llevaran consigo el ganado capturado.
Antes de poder concretar del todo su proyecto, Alsina murió y fue reemplazado por el joven general Julio A. Roca. La política desarrollada por Alsina había permitido ganar unos 56 mil kilómetros cuadrados, extender la red telegráfica, la fundación de cinco pueblos y la apertura de caminos.
El nuevo ministro de Guerra aplicará un plan de aniquilamiento de las comunidades indígenas a través de una guerra ofensiva y sistemática. El propio Roca había definido con sus palabras la relación de fuerzas:
- «Tenemos seis mil soldados armados con los últimos inventos modernos de la guerra, para oponerlos a dos mil indios que no tienen otra defensa que la dispersión ni otras armas que la lanza primitiva»
Los teóricos de la modernización del país proponían poblar el «desierto» que se suponía deshabitado.
No eran numerosos los habitantes, pero había pobladores previos a esta postulación. Estos habitantes eran los indígenas. Un testigo de la época, el Ingeniero Trevelot, opinaba:
- “Los indígenas han probado ser susceptibles de docilidad y disciplina. En lugar de masacrarlos para castigarlos sería mejor aprovechar esta cualidad actualmente enojosa. Se llegará a ello sin dificultades cuando se haga desaparecer ese ser moral que se llama tribu. Es un haz bien ligado y poco manejable. Rompiendo violentamente los lazos que estrechan los miembros unos con otros, separándolos de sus jefes, sólo se tendrá que tratar con individuos aislados, disgregados, sobre los cuales se podrá concretar la acción. Se sigue después de una razzia como la que nos ocupa, una costumbre cruel: los niños de corta edad, si los padres han desaparecido, se entregan a diestra y siniestra. Las familias distinguidas de Buenos Aires buscan celosamente estos jóvenes esclavos para llamar las cosas por su nombre»
El éxito obtenido en la llamada “conquista del desierto” prestigió frente a la clase dirigente la figura de Roca y lo llevó a la presidencia de la república. Para el Estado nacional, significó la apropiación de millones de hectáreas.
Estas tierras fiscales que, según se había establecido en la Ley de Inmigración, serían destinadas al establecimiento de colonos y pequeños propietarios llegados de Europa, fueron distribuidas entre una minoría de familias vinculadas al poder, que pagaron por ellas sumas irrisorias.
Algunos ya eran grandes terratenientes, otros comenzaron a serlo e inauguraron su carrera de ricos y famosos. Los Pereyra Iraola, los Álzaga Unzué, los Luro, los Anchorena, los Martínez de Hoz, los Menéndez, ya tenían algo más que dónde caerse muertos.
Roca había dicho: «Sellaremos con sangre y fundiremos con el sable, de una vez y para siempre, esta nacionalidad argentina, que tiene que formarse, como las pirámides de Egipto, y el poder de los imperios, a costa de sangre y el sudor de muchas generaciones»
1970. Muere Janis Joplin
Víctima de una sobredosis de heroína, fallece Janis Joplin a los 27 años en un hotel de Los Ángeles.
Habían pasado apenas dos semanas de la muerte de Jimi Hendrix y el rock sumaba otra pérdida. También a los 27 años. También por severos desajustes con el alcohol y las drogas duras. También en la plenitud de sus músicas, moría Janis Lyn Joplin. La desgarrada, sufrida, visceral y adorada Janis. Estaba grabado entonces el mejor disco de su vida (Pearl, claro).
El 4 de octubre, satisfecha por haber grabado varias de esas canciones que eternizaría su voz en el imaginario rocker de occidente, decidió poner primera en su Porsche descapotable e irse de copas al bar Barney’s Beanery. Nada se supo del interin, hasta que horas después la encontraron muerta al lado de su cama, en el Landmark Motor Hotel de Los Ángeles.
No la mató el alcohol. Pero la traicionó. La tentó para colarse otra vez heroína y, faltando veinte minutos para las dos de la mañana de ese domingo otoñal, un pico la dejó sin respirar para siempre. El cuerpo lo encontraron bastante después, cerca de las ocho de la noche, con dosis altísimas de la droga.
Igual que Hendrix -además de las coincidencias etarias y contraculturales-, Janis fue icono y figura de los dos festivales más importantes del segundo lustro de los ’60: Monterrey Pop (1967) y Woodstock (1969). Ambos fueron revelación en el primero y figuras consagradas en el segundo. A Janis, específicamente, el mundo la amó a partir de su brillo en Monterrey.
La cantante estadounidense dejó en su testamento 2500 dólares para que sus amigos organizaran una fiesta en su honor.
Actuó en Woodstock junto a Brian Jones, Jimi Hendrix y Jim Morrison, fallecidos los cuatro entre 1969 y 1971, todos con 27 años, forma parte de la galería de muertes trágicas del rock de fines de los 60 y comienzos de los 70.
Su historia sirvió de base para la película »La rosa».(1979)
1917. El nacimiento de Violeta Parra
En San Carlos, Chile, nace Violeta Parra. Una de las figuras clave de la cultura latinoamericana, dejó un corpus de canciones que es fundamental en la música popular del continente.
Autora de temas como “El guillatún”, “Gracias a la vida”, “Arriba quemando el sol”, “Rin del Angelito”, “Volver a los 17”, “La carta”, “Run se fue p´al norte”, la mayoría de sus canciones más conocidas figuran en Las últimas canciones, disco que se publicó en 1966.
Se suicidó en 1967.
2009. Adiós a Mercedes Sosa
A los 74 años fallece Mercedes Sosa, la voz más grande del folklore argentino.
Había nacido en San Miguel de Tucumán en 1935.
Grabó discos emblemáticos como Mujeres argentinas y padeció el exilio.
Su regreso en 1982 convocó a multitudes en el Teatro Ópera.
La velaron en el Congreso, donde fue incesante el desfile de amigos y admiradores.
1971. Nace Pablo Trapero
Nace Pablo Trapero, uno de los renovadores del cine argentino en lo que va de este siglo.
Sorprendió con su opera prima, Mundo Grúa, estrenada en 1999.
Luego llegaron títulos como »El Bonaerense», »Carancho», »Elefante Blanco» y »El Clan», que le valió el León de Plata en el Festival de Venecia de 2015.
Su última película es La Quietud.
- 1961: nacimiento de Silvina Garré, cantante rosarina de rock argentino. También es psicoanalista.
- 1975: fallecimiento de José ‘Pepe’ Biondi, humorista argentino que marcó época en su país por sus personajes, ingenio y capacidad para hacer reír a las personas. Fue parte del programa de televisión ‘Viendo a Biondi’, así como integrante de un circo.
Día Mundial de los Animales, tal cual lo dispuesto por la Organización Mundial de Protección Animal.